Técnica de Graston
¿Sufre de una lesión en los tejidos blandos? ¿Tiene una lesión deportiva o una lesión por un accidente automovilístico? ¿Tiene cicatrices o adherencias que le provocan dolor y limitan su movimiento?
Si es así, la Técnica Graston puede ayudarte.
La técnica de Graston es una forma de movilización de tejidos blandos asistida por instrumentos (IASTM). Es un tipo de terapia manual que incorpora herramientas ergonómicas especiales que se utilizan para masajear y raspar suavemente partes de la piel.
La técnica de Graston también se puede utilizar para tratar muchas otras afecciones, que incluyen dolor lumbar, síndrome del túnel carpiano, desgarros del manguito rotador, dolor de cuádriceps, codo de tenista, fascitis plantar y dolores de cabeza.
Estos instrumentos de acero inoxidable se utilizan para curar lesiones en los tejidos blandos, como esguinces, distensiones, subluxaciones y lesiones por uso repetitivo.
Al comienzo de un tratamiento con la Técnica Graston, las áreas de la fibrosis de tejido blando se moverán para hacer que el tejido cicatricial sea más receptivo.
El borde de la herramienta de acero inoxidable se utilizará para deslizarse lentamente por el tejido blando afectado hasta que entre en contacto con una adherencia.
Nuestro fisioterapeuta luego frotará la adherencia para provocar el movimiento. Esta fricción ayudará a promover el proceso de curación de su lesión de tejido blando.
La cantidad de presión utilizada con el instrumento y la velocidad a la que se realiza variarán según la naturaleza de su afección, y se ajustarán durante todo el tratamiento.
Después de cada tratamiento, se estirará el área afectada y nuestro fisioterapeuta le proporcionará bolsas de hielo si experimenta algún dolor.
La mayoría de los pacientes que reciben la técnica de Graston se someten a dos tratamientos por semana, durante un período de cinco semanas. Debe esperar notar alivio en el tercer o cuarto tratamiento.
Algunos de los muchos beneficios de la técnica Graston incluyen:
● Desglose de enlaces cruzados de colágeno
● Impulsar la actividad celular para una buena salud.
● Mayor tasa de volumen y flujo sanguíneo a las áreas afectadas para mejorar la curación.
● Mayor movilidad y capacidad para realizar tareas diarias.
● Reducción de la inflamación.
● Reducción del dolor, para una mejor calidad de vida.
¿Está listo para comenzar el camino hacia el alivio y la recuperación con la Técnica Graston?
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¡Estamos comprometidos a ayudarlo a sanar y regresar a su vida sin dolor!