Los nadadores a menudo se someten a un entrenamiento muy extenuante, especialmente si la actuación a seguir es la de un atleta profesional que asiste a las competiciones. Entrenar varias veces al día, ejercitarse dentro y fuera del agua, hacer sesiones dobles, entre otras cosas, es parte de la rutina diaria de un nadador. Ciertamente, el desgaste puede ser físico, y si no se atiende, genera diversas complicaciones que podrían afectar el rendimiento deportivo.
Al ser un nadador de velocidad y / o distancia, podrías acumular millas fácilmente en una sola sesión de entrenamiento. Es por ello que este tipo de deportistas suelen desarrollar síntomas de dolor y estrés repetitivo o lesiones por uso excesivo, del tipo que se presenta en deportes con movimientos repetitivos o cíclicos. Si estas dolencias no se tratan a tiempo, pueden convertirse en enfermedades crónicas.
La quiropráctica es una especialidad médica de prevención, el tratamiento y el regreso del deportista a la práctica deportiva.
Un quiropráctico realiza diferentes técnicas terapéuticas para:
- Estabilizar las articulaciones.
- Fortalecer los músculos.
- Ampliar el rango de movimiento articular.
- Disminuir el dolor percibido.
- Mejorar el control neurológico.
- Obtener una postura correcta.
- Entre muchas otras cosas.
La atención quiropráctica regular ayuda a los nadadores a prevenir y tratar correctamente los factores de riesgo asociados con las lesiones musculoesqueléticas, disminuyendo la probabilidad de desarrollar dolor, inflamación o el cese de la actividad deportiva como tal.
En Balance Total podemos hacer que regreses a tus actividades diarias en el menor tiempo posible gracias a la experiencia de los expertos, y la aplicación de diversos métodos terapéuticos.
Programa una cita con nosotros y recibirás la atención adecuada que tu caso requiere.